Se acabó lo que se daba…

Hoy decimos definitivamente adiós al curso 2011-2012. Con un claustro remataremos la semana de papeleos y trabajo burocrático que tanto nos cuesta a algunos, y daremos paso a un tiempo de descanso, de coger fuerzas y tratar de animarse para lo que está por llegar.

Parece que todos los años, a mi me sucede lo mismo, que llego a final de curso, completamente cansado, pero esta vez creo que ha sido peor. He llegado cansado, pero sobretodo, desmotivado y desilusionado. ¿Por qué? Las razones creo que las conocemos todos y no hace falta volver a verbalizarlas aquí. Cada uno tenemos nuestros motivos para encontrarnos como nos encontramos, pero la verdad, es que me fastidia y mucho que lo hayan conseguido. Por suerte, tengo la ventaja que en lo personal tengo una pareja maravillosa con la que poder hacer planes de futuro, tengo una familia estupenda que me quiere y me cuida, tengo una gran cantidad de amigos con los que poder compartir momentos e inquietudes, tengo dos perros y un conejo que me alegran solo con mirarlos… en fin, no me puedo quejar. Pero por el lado profesional, bufff, todo parece más complicado.

Quizás sea todo eso bueno lo que hace que la balanza se mantenga en pie y no se vaya todo al traste. Esa balanza es la que me demuestra que hay que aprender a relativizar y entender los momentos, como lo que son, momentos, momentos buenos y momentos malos. Si no aprendemos a ser capaces de ver la parte positiva de cada uno de los momentos y situaciones con las que nos encontramos, nos hundiremos en la miseria y seremos incapaces de avanzar. Debemos hacer el esfuerzo de reencontrarnos con nosotros mismos, pararnos, serenarnos, y hacer balance de todo aquello que nos ha sucedido durante el año, de lo que hemos avanzado y de lo que debemos mejorar. Estoy convencido de que hay muchos momentos por los que debo dar las gracias. He aprendido muchísimo este año, tanto de compañeros y compañeras del centro, como de mis alumnos y alumnas. Sin duda, me quedo con lo que me enseñan casi a diario mis alumnos/as… «Mirar con ojos de niñ@»

Este curso, he aprendido a pesar de todo, que esa mirada es la clave para seguir avanzando y para que nadie te arrebate la ilusión. Todavía no he sido capaz de ponerlo en práctica al 100%, pero lo conseguiré. Parece que viven en la ignorancia, pero no es cierto, simplemente, miran con ojos de niñ@, algo de lo que deberiamos aprender los adultos. Esa mirada consiste en mirar con humildad, con sencillez, sin generar problemas donde no los hay, con pensamientos simples… Un problema, una solución, y hasta que no llegue el problema, no te lo plantees, porque simplemente, no es necesario pararse a pensar en el… «Y si resulta que». Tengo todo el verano por delante para recuperar esa forma de mirar, y además tengo la suerte de que me voy de Campamento durante 12 dias rodeado de niños y niñas estupendos, que estoy convencido me van a enseñar a mirar como ell@s, y esa oportunidad no la voy a desaprovechar.

He perdido muchos momentos de relación con otros docentes a los que quiero y admiro durante todo el año, y más ahora que viene época de Jornadas impresionantes como #Novadors12 o #Aulablog, pero se que algún dia volveré a recuperar esa relación. Tengo muy claro que las amistades no dependen de conceptos como el tiempo o el espacio, simplemente depende de uno mismo. Y por eso, soy consciente que esto no ha sido y es más que un pequeño parentesis que me sirve para valorar todas esas relaciones que me ayudan a crecer tanto en lo personal como en lo profesional.

Y a los que están por ahi arriba pensando en rescatar bancos y acabar con los servicios públicos, tan solo decirles que no podrán acabar con nosotr@s. Podrán hacer que nos tambaleemos, que dudemos, que lo pasemos mal, pero nunca, absolutamente nunca podrán acabar con nosotr@s, porque tenemos muchos niños y niñas que dia a dia nos van a enseñar a mirar como ell@s y a darnos cuenta de que vosotros y vosotras no sois nadie sin el pueblo, vosotros y vosotras que nos gobernais, no sois nadie para decirnos lo que es bueno o malo para nosotros, vosotros y vosotras que promulgais que haceis lo que es necesario para salir de la crisis, no sois nadie para arrebatarnos nuestra esperanza y nuestra ilusión. Un dia, volveremos a tener el poder en nuestras manos y entonces os acordareis de quién tiene el poder, el pueblo.

Feliz verano a todo el mundo. A coger fuerzas, disfrutar, y sobretodo, a intentar sonreir, y al que quiera que hagamos lo contrario, que nos amarguemos, lloremos y nos desilusionemos… sencillamente:

¡Que le JODAN!