He llegado tan solo hace una hora a casa, y en este breve tiempo ya he tenido la suerte de leer y hablar de unas cuantas impresiones de este EABE11. La verdad es que no sabía si acostarme, dejar reposar lo vivido y expresarlo aquí en otro momento mas relajado o bien perder unos cuantos minutos de sueño y escribir una primera reflexión en «Caliente» sobre lo vivido y compartido este #EABE11. Como os podreis imaginar, ya sabeis cual es la respuesta 😉
Con este post no pretendo hacer ninguna crónica porque se que el mejor cronista del Reino estaba allí, y que mejor para contarlo que el mismisimo @juanmadiaz. Al igual que tampoco voy a ir nombrando a todxs y cada una de las maravillosas personas que he tenido el placer de conocer este fin de semana. Lo que si puedo decir, es que para mi ha sido insuficiente el tiempo que he tenido para conversar con estas personas tan magníficas, ojalá algún dia se cumpla el sueño de convertir los dias en dias de 36 horas 🙂
Lo allí vivido lo podría resumir en dos palabras: IM-PRESIONANTE. Sencillamente ha sido un fin de semana muy intenso donde compartir con gente vinculada con el mundo educativo la necesidad de cambiar la educación que tenemos delante. Quizás, hemos podido dar la sensación de endogámicos, grupo elitista, creernos los mejores… pero no es eso lo que yo he sentido. Quizás el no poder expresarnos correctamente, el no saber hacerlo, el ser viscerales en determinados momentos, el dejarnos llevar más por los sentimientos que por otra cosa, es lo que ha podido llevar a que algunos hayamos podido sentir estas cosas, pero prefiero quedarme con otro aspecto, sencillamente, porque es lo que más me ha marcado y más me ha recargado las pilas para seguir mañana trabajando, llegando a mi centro con una sonrisa, y con la ilusión de poder disfrutar de mi alumnado este poco tiempo de curso que nos queda.
De este EABE11 (El único al que he podido asistir) me quedo con los ratos «no-oficiales». Con esos momentos distendidos, divertidos y no planeados. Esos momentos en los que poder compartir sentimientos, emociones, inquietudes, reflexiones, miedos, alegrías, esperanzas, sueños, ilusiones… sencillamente momentos en los que la horizontalidad se ha hecho presente y donde todos podiamos hablar de tú a tú, sin importar los años trabajados, los premios recibidos, el «reconocimiento oficial» o el nivel de «gurusidad». Creo que esto es algo digno de admirar y felicitar a toda la gente del EABE11, porque la mayoría de «Saraos» no tienen la capacidad de ofrecer esos momentos. Creo que para cambiar las cosas, no es necesario hacer grandes proyectos, grandes conferencias, presentaciones, unidades didácticas ni nada parecido. Para cambiar las cosas tan solo es cuestión de actuar y de dialogar. Para ello es necesario generar espacios donde todos y todas tengamos voz y voto, donde podamos compartir y enriquecernos de todas y cada una de las cosas maravillosas que hace el resto, sin importar las herramientas que utilice ni en calidad de «que» lo haga. Poder compartir la esperanza de cambiar la educación con familiares, alumnado y profesorado, es lo más grande que nos puede pasar y nos puede ayudar a diario.
La capacidad del cambio educativo no depende de unos cuantos maestros o maestras inquietas, depende de todos y cada uno de los ciudadanos que formamos nuestra sociedad. Por ello es necesario que el debate educativo salga a la calle, que la educación sea un tema que preocupe y se hable de él, y que realmente consigamos que no hayan voces silenciadas. Cada dia que pasa, niños y niñas de nuestro sistema, siguen quedándose en el camino, y eso es algo, que no podemos permitir. Cambiar esto, es cosa de todos y todas, y como diria Massimo, la unión hace la fuerza. Sin imponer, sin exigir, tan solo animando, contagiando, apoyando y acompañando a quien más lo necesita.
Por ello, para poder escribir el futuro, y salvar el presente, pongámosnos propósitos capaces de cambiar la educación, capaces de cambiar aquello que no nos gusta, capaces de salvar el presente.
Y sin más solo decir que unas gracias especiales a Linda por haberme juntado con 2 personas maravillosas e increibles en un proyecto tan esperanzador para mi. Diego e Isica… GRACIAS!!!! Ha sido un placer poder compartir estos dias con vosotros, es muy sencillo hacer las cosas cuando estas rodeado de personas con semejante calidad humana.
Al resto… GRACIAS, ha sido una experiencia inolvidable, a pesar de no haber tenido todo el tiempo que me hubiera gustado para poder hablar con todos y cada uno de vosotrxs. Un abrazo enorme.
Gracias a ti, olmillos. Transmites una energía y unas ganas de cambiar esto que llega, macho. Y además eres insultantemente joven…
Lo pasamos muy bien, es cierto. Encantado de haberte conocido personalmente.
Un abrazo.
Juanma.
¡¡Eres un «terremoto educativo»!! Y además muy jovencito, lo cual quiere decir que vas a dar caña…
Transmites un entusiasmo y unas ganas de cambio…¡que da gusto!
Un abrazo y no cambies
Hola Jaime, soy estudiante de magisterio, alumna de
Jordi A, coincidimos en el seminario de informática que se hizo en
la UJI. He seguido el EABE a través del twiter y los blogs, y me
iba haciendo una idea de todo lo que allí se estaba cociendo.. Me
hubiera encantado poder asistir al evento, aunque todavía no soy
maestra, se me contagia esa ilusión que transmites en las cosas que
cuentas y esa energía para seguir adelante pese a todos los
inconvenientes.
Estoy convencida que la escuela necesita maestros con
ese espíritu que crean firmemente que el cambio es posible y que
luchan por conseguirlo. Sería de necios pensar que fue un
acontecimiento elitista ya que la máxima que mueve estos eventos es
el de compartir experiencias de educación y de gente implicada y
preocupada en que las cosas tomen por fin un nuevo rumbo.
El mundo del mañana es la educación de hoy
¡REACCIONEMOS!.
Hola la escuela necesita más maestros como tú. Hazme un favor multiplícate por diez mil y seguro que seremos capaces de hacer realidad un sueño posible. ¡Cambiar la escuela!
Encantada de compartir contigo algunos ratillos en el Eabe11 Te esperamos en el Eabe12 esta vez en mi tierra, Sevilla
Besos