El pasado viernes por la tarde, se me ocurrió la magnífica idea de darles la oportunidad de expresarse sin tapujos, y aprovechando que una de mis manias es la pasión por las marionetas decidí darles la oportunidad de dejarse llevar por este fantástico mundo de la imaginación y la creatividad. Reconozco que fue una tarde dura, bastante dura, incluso al borde del colapso 🙂 Pero decidí que debian ser ellos y ellas mismas quienes decidieran en todo momento, que y como hacer con las marionetas. Me puse manos a los obras, saqué todo el instrumental que tenia de marionetas, de dedo, de manos y me fui rapidamente al maravilloso mundo de infantil donde en breves minutos pude disponer de un estupendo teatro de marionetas. De hecho, este teatro a partir de ahora se va a quedar en mi aula, ya que en infantil me di cuenta que les sobran y de hecho la mayoría de ellos estan cogiendo polvo, así que, para coger polvo, mejor darle uso ¿NO?
Y así fue, monte el teatro de marionetas en mi aula, repartí todas las marionetas y les di tiempo para organizarse en grupos para que se inventaran obras a representar. Cada uno y cada una hizo lo que quiso y como quiso… resultado? CAOS!!! Pero dentro del Caos, había una organización no instaurada, se veia fluir la sonrisas, las risas, los enfados, la imaginación y la creatividad. Desde el chaval o chavala que no se atrave a participar y hablar en clase y ver como se transforma con una marioneta en la mano hasta el que había que sacarlo arrastras del teatro para que pudiera dejar a sus compañeros y compañeras participar. Fue una experiencia agotadora pero no os podeis ni imaginar hasta que punto… GRATIFICANTE. ¿Y hemos aprendido algo? ¿Esto va a hacer que mejoren en los examenes? ¿Los niveles de éxito de este alumnado van a mejorar? Si he de ser sincero, no creo que por usar marionetas en clase y dejarles sembrar el caos durante un par de horas pueda suponer un cambio «cuantitativo» en sus notas, pero de lo que si que estoy seguro, es un cambio en su forma de expresarse, en su forma de participación, en la escucha activa, en el proceso de diálogo, comunicación y expresión, iremos dando pequeños pasitos, pero poco a poco, seguro que se notan los resultados.
Para mi, una parte importante de su proceso de aprendizaje es dejarles hacer, es dejarles ser y simplemente, ver lo que sucede. Los limitamos mucho más de lo que nos imaginamos, muchísimo, sin darles la oportunidad de pensar y decidir por ellos y ellas mismas. Poco a poco estoy convencido que sus competencias lingüísticas y comunicativas, iran en un aumento, pero sobretodo, su competencia social. No es facil encauzar y potencializar toda la creatividad e imaginacion que durante algun tiempo nos hemos limitado a erradicar o a contener, fue como una explosión de algo que tenian guardado en su interior. Espero poder seguir en este aspecto trabajando con ellos, pero sobretodo, disfrutando de verlos aprender, cambiar y progresar en su camino de aprendizaje y de vivencias personales. Tengo claro, que los #librosdetesto me dirian que esto es una perdida de tiempo y una aberración, pero también tengo muy claro lo que necesita mi alumnado, y prefiero guiarme por sus necesidades a guiarme por alguien que nisiquiera los conoce y lo que es peor, no les importa nada en absoluto. Esto es el principio, de lo que espero se convierta en un espacio de expresión, libertad, creatividad e imaginación. Poco a poco, iremos mejorando nuestra capacidad de diálogo, de interpretación y de comunicación. Esperemos que disfruteis con lo que grabamos entonces.
¡Un abrazo!
¡Uf! Cómo me ha gustado lo que he leído.
Mira, lo que realmente vale es venir a la escuela a hacer cosas con mis compañeros y compañeras. Para leer un libro «que alguien se empeña en hacerme creer que esto es lo importante y me lo tengo que aprender para un examen» no hace falta venir al cole.
El cambio metodológico es este. Poner materiales a su alcance, hacer ligeras propuestas y… MIRAR. Si pudieras grabarlo sería fantástico; no sabes lo que se aprende remirándolo.
Perdona la inmodestia pero te remito a mi blog niuno-menos.blogspot.com Está lleno de experiencia parecidas a esta que cuentas.
No dudes que con un examen no aprenden nada duradero, con la experiencia vivida, sí.
Enhorabuena por hacerlo. Te animo a que lo repitas y nos lo cuentes.
Te aseguro que lo iremos repitiendo 🙂
Enhorabuen Jaime por la experiencia y por la reflexión posterior. No podría estar más de acuerdo con lo de permitir que los alumnos se expresen libremente, y desde la «escucha activa» promover espacios de aprendizajes aprovechando las situaciones imprevistas. Aprenden ellos y aprendemos nosotros, además de pasárnoslo de miedo, que quizá sea lo que más importe. En mi cole no hay infantil para robarles un teatrillo, pero quizá fabrique uno para utilizarlo en secundaria, seguro que les encantará. A própósito, no puedo ver el vídeo de Youtube, me dice que el usuario lo ha quitado.
Un abrazo fuerte.
Alejandro
Hola Alejandro!!! Sin duda, seguro que les encantará tener un teatro de marionetas en Secundaria, porque por asombroso que parezca, todos escondemos un niño o niña en nuestro interior, aunque queramos ser adultos, deberiamos ser capaces de sacarlo a relucir. Lo que sucede en este tipo de experiencias donde se pueden expresar creativamente y en libertad es algo increible, dando rienda suelta a todo lo que llevan en su interior, y lo mejor de todo es que descubres como se siente cada uno, lo que vive cada uno y ver en que medida les podemos ayudar en su proceso de aprendizaje.
Una experiencia para repetir a lo largo de todas las semanas, respetando sus tiempos, sus espacios, sus contenidos, sus diálogos, sus debates, sus reflexiones, sus risas, sus enfados… todo.
😉